miércoles, 27 de enero de 2010

CAPITULO 43

- ¿Puedo hablar contigo?,- Dani susurraba a Ángel. Estaban frente a frente, sobre la mesa.

- ¿Qué pasa?

- Es sobre Berta...

- Dime,- Ángel estaba sorprendido. Su amigo estaba muy serio.

- Es una gran amiga, de verdad. Y la veo muy enamorada de mí, pero...
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- ¿Pero qué?,- Patricia no salía de su excitación. Berta miraba al suelo, preocupada.

- Pero Dani no me corresponde...

- ¿Cómo que no? ¡Si estáis hechos el uno para el otro!

- Puede ser, pero Dani sigue amando a Ángel...
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- ¿Cómo?,- Ángel no comprendía.

- Se lo dije anoche,- Dani se aleja un poco de Ángel -. Ya sabes que cuando te llamé esta mañana, te dije que estuvimos hablando y eso... Y le dije que...

- Pero ya quedó claro que tú y yo sólo somos buenos amigos...,- Ángel deja su mano sobre el hombro de Dani.

- Como Berta y yo...,- Dani no se atrevía a mirar a su amigo a los ojos.
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- Ya sé cómo se siente Dani...,- Berta estaba a punto de romper a llorar. Patricia la abraza para consolarla.

- Pero Ángel ya le dejó claro que lo suyo no podía ser.

- Como lo nuestro...,- las lágrimas estaban a flor de piel.

- No,- la toma de los hombros -. Estáis hechos el uno para el otro. Piensa además que Ángel fue quien os dejó solos en la habitación cuando Dani estuvo en el hospital,- Berta mira a Patricia a los ojos. Sonríe.

- Es verdad... Fue un momento tan dulce...
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- Pero es que no quiero hacerla daño,- Dani hablaba seriamente con su amigo -. No quiero que sufra como yo he sufrido...,- Ángel desvía la mirada por un segundo -. No quiero romperla el corazón...

- Tranquilo. No queremos que os acostéis ya. No. Vosotros seguid con vuestro ritmo. Háblalo con ella. Id paso a paso. Sin prisas. ¿Podrás hacerlo?
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- Se intentará...,- Berta no estaba muy convencida.

- No te obsesiones con ello, ¿vale?,- sonríen y se abrazan -. Y ahora lávate un poco la cara, que no vean que has llorado.

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