miércoles, 16 de diciembre de 2009

CAPITULO 3

Ángel llegó hasta la puerta del bar, pero no se atrevía a entrar. Miró por las ventanas y ahí estaba, esperándole. Ángel empezaba a arrepentirse de haberle llamado, pero no tenía otra opción. Era decírselo o estallar por dentro. Volvió a mirar. Se percibía el nerviosismo en el ambiente. Tragos cada vez más seguidos y largos de la cerveza, vistazos al reloj, un segundo cigarrillo apenas apagado el anterior. Tragó saliva y entró.

- ¡Joder, Ángel! ¡Creía que ya no vendrías!,- se notaba el enfado en su tono de voz.

- Perdona Dani…,- Ángel apenas le podía mirar a la cara.

- ¿Te pasa algo?,- Dani comprendía -. Cuéntame.

- Verás… Es que no sé cómo decírtelo…

- Ángel…,- Dani apoya su mano en el hombro de Ángel -. Soy tu amigo. Ya sabes que cualquier cosa que te pase me lo puedes contar.

Ángel miraba nervioso a todas partes. Dani lo sabía y trató de calmarle pidiendo otra cerveza para su amigo.

- Verás Dani…,- Ángel miraba su vaso, sentado a la barra -. No sé cómo explicarlo, pero… Me encuentro en un conflicto.- Dani le miraba fijamente, como si tuviera miedo a perderse algo de la conversación -. Sabes que Emma y yo llevamos años juntos. Vivimos juntos, tenemos la hipoteca de la casa a partes iguales, e incluso llevamos unos meses pensando en ampliar la familia…,- Dani no pudo evitar sonrojarse con el último comentario. Ángel cuidando de un bebé… -. Pero es que…

- ¡No me digas que vas a romper con ella!,- Dani se sorprendió.

- ¡No, por Dios!,- Ángel por fin apartó la mirada del vaso y se posó en los azabaches del rostro de Dani -. Eso jamás…

- Dime entonces…

- Me temo que hay otra persona…,- Ángel no conseguía dejar la mirada en un punto fijo; volvió al vaso.

- ¿Cómo que hay otra persona?

- Sí…,- respondió tímidamente Ángel.

- Y… ¿la conozco?,- Ángel ladeó un poco la cabeza. Dani entendió y sonrió levemente -. ¿Quién es?

- No me atrevo a decir siquiera su nombre. Es que si lo digo me sentiría como si ya le fuera infiel a Emma. No puedo, Dani. No puedo.

- No me digas que es alguien del programa…

- Pues sí… Sí…,- la voz de Ángel estaba cada vez más falta de volumen.

- Pero… ¿lo sabe Emma?

- No. No lo sabe… Ni ella ni nadie más. Sólo tú…

- Bueno, y dime… ¿Quién es?

- Dani… No… No me obligues, que ya me siento mal…

- Entonces, ¿por qué me has llamado si al final no me lo vas a decir?

- Necesito decírselo a alguien, a alguien de confianza, que me guarde el secreto, pero cuanto más quiero contártelo, más me cuesta…

- Bueno…,- Dani apaga el cigarrillo en el cenicero, toma una servilleta de papel y se saca un bolígrafo del bolsillo de su chaqueta -. Si no me lo puedes decir, escríbelo,- y le entrega papel y boli.

Ángel lo coge y se dispone a escribir, pero algo le detiene. Se queda mirando el blanco de la servilleta, con el logotipo del bar. No conseguía hacer que la punta del bolígrafo tocara el papel. Dani le llama un par de veces y chasquea los dedos delante de sus ojos. Ángel se envalentona y comienza a escribir. Dani abre los ojos de par en par a medida que Ángel añade una letra más.

2 comentarios:

  1. me encantaa!!! esta fic es "pangel" verdad??!! :O por favor sigue escribiendoo!! jajajaja...

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  2. jajajaja chamo me esta encantando esto jajaja :) ojalo leyeran jeje

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